La alta demanda en el mercado de la traducción de textos jurídicos ha llevado a las instituciones a brindar diversas herramientas de formación para los traductores. Asimismo, los traductores también se han visto obligados a formarse por cuenta propia, debido en buena parte a una competencia feroz que aumenta día a día.
El comercio internacional es una de las principales razones por las que la traducción jurídica requiere de traductores especializados. Los tiempos han cambiado, y aquellos días en los que el oficio de traductor era desempeñado por escritores, y hasta poetas, han desaparecido. Ya no se trata de traducir un simple texto, sino que la traducción jurídica va más allá y abarca importantes figuras jurídicas.
En el caso del comercio internacional, incluye la firma de contratos de compraventa de representación comercial, de transporte, de seguro, entre otros documentos de interés jurídico. Por otra parte, la creciente e inesperada movilidad de la población mundial, ya sea por casos migratorios o por turismo, ha incrementado la demanda de traductores formados en traducción jurídica.
Ahora se trata de agencias inmobiliarias que han tenido la necesidad de negociar sus propiedades con extranjeros, o de extranjeros que otorgan testamento fuera de su país. Y, por si fuera poco, algunos migrantes son víctimas y autores de delitos en tierras ajenas, hecho que también hace necesaria la existencia se servicios de traducción jurídica.
Esto significa que la traducción jurídica precisa de profesionales formados y especializados para asumir cada una de las misiones encomendadas. Sin embargo, hay un aspecto a tener en cuenta: pocos traductores jurídicos dedican tiempo a su formación profesional y, quienes lo hacen, no son suficientes para satisfacer la alta demanda del mercado.
Conoce la clasificación de los textos jurídicos
Las leyes, decretos, contratos y otros tipos de documentos forman parte de los textos jurídicos. Conocer con exactitud su clasificación es muy importante para desarrollar los trabajos de traducción. Durante este proceso, el traductor se enfrentará a dificultades terminológicas de interpretación y equivalencias que solo podrá solventar cuando esté preparado y domine con profesionalidad las estrategias de traducción.
Aunque los textos jurídicos se pueden clasificar de diferentes maneras, hoy queremos apoyarnos en la clasificación que hace Anabel Borja, quien es intérprete jurado para la lengua inglesa y profesora titular de traducción jurídica de la Universitat Jaume I, en el libro Estrategias, materiales y recursos para la traducción jurídica inglés-español, publicado en 2007 y editado por la Universitat Jaume I, Servei de Comunicació i Publicacions.
Según Borja, los textos jurídicos se pueden clasificar en siete tipos que mencionaremos a continuación.
Documentos de aplicación del Derecho: En esta primera clasificación se incluyen contratos, expedientes, documentos notariales, pólizas de seguro, escrituras, testamentos, etc. Cabe destacar, que este tipo de documentos es el más demandado en el campo de la traducción de textos jurídicos, razón por la cual los traductores reciben un mayor número de encargos.
Textos normativos: Estos textos incluyen todas las disposiciones normativas, como constituciones, leyes, reglamentos, decretos y Estatutos de Autonomía.
Textos doctrinales: Está relacionado con libros de texto, tesis, manuales de Derecho, textos de explicación del Derecho y artículos en publicaciones especializadas.
Textos judiciales: Son los textos que regulan las relaciones entre particulares, así como entre la administración y los órganos judiciales. Estos textos son: demandas, sentencias, citaciones, denuncias, querellas, exhortos, etc.
Jurisprudencia: Este tipo de textos jurídicos incluyen las sentencias dictadas por los tribunales y la doctrina que contienen. Pueden ser las sentencias recogidas en repertorios.
Diccionarios jurídicos: Son aquellos diccionarios diseñados para ofrecer información relacionada con los términos del Derecho.
Textos divulgativos: Hace referencia a todas las revistas especializadas en el ámbito jurídico.
De acuerdo a los documentos de Aplicación al Derecho, se puede hacer otra subclasificación. De esta manera se pueden abarcar otras dos ramas esenciales del Derecho.
Documentos civiles: Entre los documentos civiles más destacados se encuentran: matrimonio, divorcio, testamentos, poderes y el trush.
Documentos Mercantiles: Este tipo de documentos se refieren a las actas y estatutos de sociedades.
Modalidades en la traducción jurídica
La traducción jurídica tiene diferentes modalidades, que solo pueden ser dominadas por la experiencia y conocimiento de un traductor especializado. A continuación se detallan las principales modalidades que se usan en la traducción jurídica.
La traducción escrita es la modalidad que predomina en la traducción jurídica. Esto se debe a que la mayoría de documentos que se traducen son escritos y reposan en el registro jurídico.
Otra de las modalidades es la traducción a la vista. Se emplea en juicios y el traductor debe leer el acta redactada por el secretario. Asimismo, se usa en las notarías para leer el documento que será firmado por las partes involucradas.
La interpretación también es otra modalidad de la traducción jurídica. Es muy usada en zonas fronterizas. Por esta razón, en algunos países como Estados Unidos está muy avanzada la profesión de Court Interpreter. De igual forma, la interpretación se usa en juicios durante los careos, reuniones entre abogados y clientes, así como en la firma de contratos en notarías.
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